Una de las cosas tontas pero notables que llamaron mi atención en Alemania. Una huincha de medir que sólo mide en centímetros. Sin pulgadas. Ni siquiera le dejaron pulgadas "por si acaso", por si se está en la necesidad de medir cosas de fuera. Ni para eso les importó. Sólo centímetros y, si se llegara a dar el (improbable) caso de necesitar pulgadas, mala suerte. Ese poder que tienen para permitirse ignorar la cultura gringa.
Hay que salir de América para ver esto.